¿Apuntala AMLO campañas de la 4T en Puebla?
El presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, hizo una “gira sorpresa” a Puebla y no le contó ni al gobernador Miguel Barbosa.
Por: Guillermo Castillo
Apenas llevamos una semana de campañas federales en Puebla y el presidente Andrés Manuel López Obrador ya se puso en modo “operador electoral”, aunque él jure que no.
Puebla, donde Morena (su partido) trae un verdadero relajo con el tema de las candidaturas, fue el primer lugar para visitar, hacer presencia.
El chiste era recordarle a la gente quién es el presidente, como si fuera posible olvidarlo gracias a las mañaneras y afirmar a Morena sin hablar de Morena, como siempre lo ha hecho.
Así, AMLO y su gente consideraron que viajar a Ayoxuxtla, este sábado, 10 de abril de 2021 (y de paso, echarle una garrita de león a sus candidatos) era una gran idea.
Obviamente, en el gobierno federal no fueron mensos. No hubo difusión del acto protocolario y es más, ni invitaron al gobernador Luis Miguel Barbosa, a quien le avisaron de todo al cuarto para la hora, no sea que se vaya a “malinterpretar”.
Es cierto que con eso se “salva” el asunto legal de la veda electoral y que nadie podría acusarlo de hacer campaña hacia su partido.
Sin embargo, en los hechos, el presidente de la República sí violenta el principio de paridad en la contienda, al pasearse y difundir en sus (ni tan) “benditas redes sociales” su gira.
Además, ¿adivinen a quién se trajo a Puebla? Nada más ni nada menos que a Román Meyer Falcón, secretario de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU).
Así es, ese funcionario cuya dependencia financia en este momento, obras públicas multimillonarias en la zona metropolitana de la capital.
Más de uno dirá: qué mal pensado eres. Escribes como fifí, conservador; pero ¿no dice el dicho: piensa mal y acertarás?
Ahora, van las razones de mi reflexión: López Obrador no es tonto. Sabe que políticamente necesita mantener la mayoría en el Congreso de la Unión.
El presidente necesita a los diputados federales para manejar, entre otras cosas, la conformación del Presupuesto de Egresos de cada año y garantizar dinero para sus megaproyectos.
Si pierde esa mayoría, las reformas y obras de la cuarta transformación comenzarán a bloquearse. Habría que pelearlos, que cabildearlos y adivinen ahora quién no sabe ni quiere hacer eso…
Puebla, en ese sentido, le da al presidente 15 candidatos a legisladores a los que hay que apoyar y su imagen, aunque desgastada naturalmente por el ejercicio de gobierno, es muy redituable electoralmente.
Respecto al uso de redes sociales. López Obrador aprovecha 2 cosas:
La primera, que las campañas y difusiones en redes sociales no están legisladas, así que prácticamente puede hacer lo que quiera para llegar a sus miles de fieles seguidores.
La segunda, que las campañas se desarrollarán principalmente en internet y medios electrónicos, porque la pandemia del Covid-19 impide que haya los mítines y movilizaciones de siempre.
La pregunta final es ¿le saldrá la jugada al presidente y podrá apuntalar las campañas de sus candidatos en Puebla?
Hasta la próxima.
@garturocc
