Gobierno de Pacheco Pulido dio 521 mdp en contratos a empresas fantasma
El gobierno interino de Guillermo Pacheco Pulido también dio contratos de obra pública sobre proyectos que jamás se ejecutaron.
Por: Guillermo Castillo | Foto: Archivo
Seis meses bastaron para que la administración de Guillermo Pacheco Pulido, a través de su Secretaría de Infraestructura (SI), incurriera en anomalías por más de 521 millones de pesos, al entregar 10 contratos de obra pública a empresas fantasma o por proyectos inexistentes.
Lo anterior se desprende de la investigación realizada por “Puebla Contra la Corrupción y la Impunidad” (PCCI), donde se detalla que dicho monto equivaldría a cerca de 50% de los mil 117 millones de pesos utilizados para dicho rubro.
Itzel Jiménez, investigadora de la organización, explica que la dependencia entonces encabezada por Antonio Peniche García distribuyó 203 millones de pesos en acciones que debían realizarse en el interior del estado, para resarcir daños provocados por contingencias climatológicas.
Sin embargo, los ayuntamientos que recibirían dichas obras indicaron que las mismas jamás se ejecutaron, que existen anomalías en la celebración de contratos y subraya que en la mayoría de los casos, las empresas eran fantasma o fachada, con direcciones inexistentes o que llevaban a lugares que no eran instalaciones comerciales.
Adicionalmente, la administración del priista contrató, por 207 millones de pesos, a un conjunto de tres empresas para realizar arreglos en el Periférico Ecológico de la zona metropolitana de Puebla; pero la más grande de ellas, Constructora Urbaniq SA de CV, no puede ser localizada.
Esto, explica Itzel Jiménez, porque el domicilio fiscal manifestado por la firma es inexistente. Al buscarla, se llega a una vivienda particular, cuyos habitantes aseguran que el lugar jamás se ha utilizado con un fin empresarial.
Por si esto fuera poco, la investigación de Puebla Contra la Corrupción y la Impunidad apunta a las obras que fueron licitadas en el interinato, que comenzaron a ejecutarse y que Luis Miguel Barbosa Huerta canceló a su llegada al poder, el 1 de agosto de 2019.
Una de ellas fue la glorieta que se construiría en el bulevar del Niño Poblano y el bulevar Atlixco, y otras fueron las rotondas que estaban proyectadas en la Colonia La Paz.
En estos casos, las firmas recibieron adelantos correspondientes a 30% del monto total de sus contratos y acumularon un total de 47.8 millones de pesos.
Aunque Itzel Jiménez sostiene que las indagatorias no arrojaron vínculos entre las empresas y actores políticos de dicha administración, sí fue posible ubicar que los empresarios repetían como socios de distintas firmas involucradas en el mismo proceso de licitación, de modo que se garantizaba que resultaran beneficiados.
Por esa razón, tanto Itzel como Enrique Cárdenas, presidente de la organización, demandaron que la Secretaría de la Función Pública (SFP) actúe en consecuencia para castigar las anomalías detectadas y que a casi un año de gestión, permanecen en el olvido.
