Violencia del 1 de julio fue premeditada, señala investigación
Los hechos de violencia que se registraron el pasado 1 de julio, durante el proceso electoral, no fueron hechos aislados sino parte de una acción concertada para suspender la jornada y crear un ambiente de inestabilidad en Puebla.
Así lo concluyó el politólogo Alejandro Guillén, tras revisar documentación oficial sobre lo ocurrido ese domingo, como parte de la primera investigación desarrollada por la organización Puebla contra la Corrupción y la Impunidad.
El especialista revisó los testimonios contenidos en las actas circunstanciadas de las juntas distritales del Instituto Nacional Electoral, entre otros documentos, que permitieron establecer que, al menos en la capital, todos los casos tuvieron las mismas características.
En ella se incluye disparos de comandos armados y la falta de respuesta por parte de las autoridades policiacas; por lo que consideró que fue un error del Tribunal Electoral del Estado de Puebla haber desechado esta situación como una causal para anular el proceso.
En ese contexto, Enrique Cárdenas Sánchez, presidente de la organización, señaló que esta investigación se hará llegar alTribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, aunque reconoció que la misma no podrá ser tomada como prueba en la impugnación presentada por la coalición Juntos Haremos Historia.