¿Quién contra Rodrigo Abdala?
Ante la nueva operación de medios, no se sorprenda si este fin de semana arrecian los ataques contra Rodrigo Abdala en redes sociales con imágenes crudas y memes.
Por: Arturo Alfaro Galán
El Instituto Nacional Electoral documentó en el expediente INE/Q-COF-UTF/93/2018 –elaborador por la Comisión de Fiscalización – que Rodrigo Abdala Dartigues, diputado federal y futuro delegado del gobierno de Andrés Manuel López Obrador en Puebla, obtuvo junto a sus colaboradores 7.5 millones de pesos provenientes del Fideicomiso Por Los Demás, creado en su mayoría por integrantes del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) para apoyar con aportaciones en efectivo a los damnificados del sismo del 19 de septiembre de 2017.
Ante ello, Rodrigo Abdala advirtió que presentará todas las pruebas en su poder para demostrar que los recursos del Fideicomiso sí fueron entregados a los damnificados por el sismo del año pasado. Además, acusó que la información vertida por el INE – y en cascada por medios locales – es imprecisa y con dolo. De eso no hay duda.
Hasta el momento hay dos versiones entorno al sobrado interés en minar el campo de acción a uno de los perfiles más prolíficos en la vida interna de Morena en Puebla.
El primero tiene todo el Sello de Casa. En una operación mediática que se reconoce por su rapidez, ofreciendo información fidedigna a medios locales y utilizando uno de los noticieros nocturnos más vistos en México a nivel nacional: Imagen Televisión con Ciro Gómez Leyva.
Las mentes maestras detrás de estos movimientos saben cómo. El caso más reciente sucedió hace unas semanas cuando el Partido Acción Nacional (PAN) defendió a nivel nacional –a capa y espada – sus labores electorales en el Hotel MM, acusando de violencia y agresiones a los morenistas, quienes –en contraste- recibieron los reflectores locales. Dos frentes, dos resultados.
Ante la nueva operación de medios, no se sorprenda si este fin de semana arrecian los ataques contra Rodrigo Abdala en redes sociales con imágenes crudas y memes, señalando la opacidad y tratando de inclinar la percepción hacia “la corrupción en Morena”. El timming político es impecable y se antoja para que el tema pueda retomarse hacia la semana entrante. Incluso, con el precedente, podría ocuparse para mermar las aun aspiraciones del morenista en convertirse en candidato a gobernador de Puebla.
La segunda versión apunta dentro de casa. Una especie de fuego amigo, con toda la animadversión posible por su reciente designación de “súper delegado” del gobierno de Andrés Manuel López Obrador en Puebla, en una especie de “subgobernador”.
Es decir, Rodrigo Abdala tendrá la operación y vigilancia de las delegaciones federales en la entidad y solo reportará al próximo presidente de la República, en una mega oficina que se encargará de armar la estructura política en los 32 estados de México.
Ante ello, Abdala tendrá que sortear las incómodas conjeturas para demostrar “peso por peso, centavo por centavo” el destino de los recursos provenientes del Fideicomiso en damnificados en Puebla. Por congruencia y decencia.
Su futuro político está en juego, si desea ser candidato al gobierno de Puebla, o bien, el “súper delegado” de AMLO. Lo único que no puede –ni debe hacer – el joven diputado es quedarse inmóvil, respondiendo a tuitazos. Pero esa es otra historia. Ya veremos.