Controlar el estrés disminuye el riesgo de padecer enfermedades

En la actualidad, el estrés forma parte de nuestra vida diaria y cada vez resulta más difícil controlarlo, porque estamos rebasados por el mismo, sin embargo es importante detectar los síntomas generados por sustancias llamadas neurotransmisoras como la adrenalina, noradrenalina y las catecolaminas que se producen en cascada cuando estamos estresados.

El estrés es una reacción normal en todas las personas y se presenta ante cualquier cambio importante, es necesario aprender a manejarlo de manera adecuada, indicó María Eugenia Torres Castillo, psiquiatra del Hospital General Regional No. 36 San Alejandro del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Puebla.

Explicó que el estrés causa cambios bioquímicos en el organismo, tales como el aumento de la secreción de adrenalina que incrementa la tensión arterial y también puede generar elevación de los niveles de glucosa en sangre.

Asimismo, la producción de ácido clorhídrico se eleva repercutiendo en la mucosa gástrica, se hace más lento el proceso digestivo alterando la motilidad intestinal, además produce espasmo bronquial o hiperventilación; condiciones que de prolongarse pueden representar serios problemas para la salud.

Por ello, aprender a controlar el estrés de la vida cotidiana disminuye el riesgo de padecimientos físicos y mentales, tales como la hipertensión arterial, cardiopatías, diabetes, dolor de cabeza y fatiga crónica, asma, gastritis y colitis, ansiedad y depresión.

Torres Castillo mencionó que es necesario modificar hábitos de vida: reducir el consumo de sustancias tóxicas como alcohol, cafeína y alimentos ricos en carbohidratos y calorías, así como evitar el tabaquismo. “Ante un evento estresante debemos aprender a respirar lenta y profundamente, evocar pensamientos agradables y estirar extremidades tratando de sentir cada movimiento muscular, por lo menos durante cinco minutos”, dijo.

La especialista precisó que en la vida diaria es necesario buscar momentos de entretenimiento y distracción, puede ser de mucha ayuda ver una película que haga reír. Se recomienda reír por lo menos tres veces al día, porque la risa es una terapia excelente no sólo para relajar los músculos de todo el cuerpo sino porque la risa es un estimulante exitoso para la producción de endorfinas mejorando el estado de ánimo.

La riso-terapia es coadyuvante para la prevención y tratamiento de afecciones psiquiátricas, tales como neurosis, depresión y ansiedad, además reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares (infarto, taquicardias, arritmias) colon irritable, asma, hipertensión arterial, diabetes mellitus, padecimientos gastrointestinales y neurodermatitis.

Otra de las opciones por las que podemos optar para evitar o disminuir el estrés es hablar con alguien sobre alguna situación estresante pues esto ayuda a liberar la presión interna y sirve de desahogo.

Destacó que el hecho de vivir en zonas urbanas en las que continuamente se está bajo estrés por el tráfico, ruidos, horarios, cambios de trabajo, etc., nos hace más vulnerables a ser víctimas del estrés y de sus consecuencias.

Cuando el estrés no se puede controlar, es posible que la persona experimente ansiedad y angustia caracterizados por inquietud, sensación de falta de aire, palpitaciones, sudoración, hiperhidrosis palmar, molestias físicas, irritabilidad, intolerancia, impulsividad, malhumor, alteraciones en la atención, concentración y resolución de problemas. Estos síntomas se mantienen constantes e incrementan su intensidad al paso de los días.

Todas estas emociones llegan a producir problemas personales, familiares, sociales, laborales y es cuando el estrés se convierte en enfermedad, la cual, descontrola y agudiza las enfermedades crónicas ya existentes o bien las detona.

Torres Castillo advirtió que este trastorno puede desarrollarse desde la infancia, ya que durante toda la vida se está propenso a cambios y a necesidades de adaptación. Por ello, es importante concientizar a la población de la importancia de aprender a controlar el estrés para evitar con ello afecciones más serias.

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