La seguridad en Puebla capital es “desastrosa”

“Así, de botepronto, yo diría que desastrosa”… Guillermo Alberto Hidalgo Vigueras responde tajante cuando se le pregunta por las condiciones en que se encuentra la seguridad pública en la capital poblana.

Han pasado casi 10 años desde que fue secretario del ramo en el gobierno municipal de la priista Blanca Alcalá Ruiz; pero sostiene que no se ha alejado del tema, porque a través de su instituto de capacitación, mantiene contacto constante con policías de Puebla y distintos lugares.

Su diagnóstico es breve: “salga a la calle y pregúntele a la ciudadanía. Vaya al centro y vea cuántos asaltos ha habido, cuántos muertos, lo que antes no se veía, al menos, en la ciudad de Puebla. Tan sólo hace poco, en una pozolería, mueren padre e hijo y tantos asaltos a cuentahabientes, a transeúntes”.

Esto contrastaría con las cifras que el Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP) publica cada mes, donde hay rubros como el robo a cuentahabiente, que ha presentado reducciones; pero el exsecretario repara en que dichas estadísticas se conforman a partir de las denuncias presentadas ante el Ministerio Público y el hecho de que no se reporten ante la autoridad, no implica que no sucedan.

Así, Guillermo Hidalgo Vigueras resume: el control de la seguridad está perdido y el responsable tiene nombre, apellido y cargo. En este momento, es Óscar Alejandro Santizo, secretario de Seguridad Pública y Tránsito Municipal (SSPTM).

El Estado les hace la tarea

Sin embargo, destaca que el problema no empezó con el titular actual de la corporación. Entrevistado por En Vivo Mx, se remonta a la época del alcalde panista Eduardo Rivera Pérez y Amadeo Felipe Lara Terrón, quien llegó de Toluca, Estado de México, a hacerse cargo de la policía y la corporación de Tránsito.

Desde entonces, afirma Hidalgo Vigueras, el Ayuntamiento de Puebla dejó que el gobierno del estado se hiciera cargo de una responsabilidad que de acuerdo con el artículo 115 constitucional, le corresponde al municipio.

Desde la anterior administración gubernamental (con Eduardo Rivera), ya la policía estatal le hacía la tarea al municipio. Trajeron gente que no era policía, que no tenía la menor experiencia en policía y los que están actualmente, sí estuvieron dados de alta en algún momento en la Policía Federal, pero no tienen una experiencia real comprobada”.

Mientras tanto, Guillermo Hidalgo sostiene que desde la gubernatura de Puebla, José Antonio Gali Fayad y su secretario de Seguridad, Jesús Morales Rodríguez, han asumido la tarea y han enviado a los elementos estatales a patrullar la ciudad.

Si no tuvieran el apoyo del gobierno del estado, de la Secretaría de Seguridad Pública, sería prácticamente imposible que (en el municipio) vigilaran”.

Un caso similar ocurre con el tema del robo de combustible y los huachicoleros, que desde la perspectiva del especialista, deberían ser combatidos directamente por el personal de Seguridad Física de Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Policía Federal, y no por la administración estatal.

Incertidumbre

Mientras sus mandos los han hecho quedarse en un segundo plano, Guillermo Hidalgo Vigueras subraya que los policías municipales de Puebla viven en una incertidumbre constante, especialmente, tras la entrada en vigor del Sistema de Justicia Penal Acusatorio.

El exsecretario señala que los uniformados no contaron con una capacitación práctica para actuar como establece la ley, pues ahora corren el riego de terminar en la cárcel al primer error cometido.

-¿Fue un error, el cambio al Sistema de Justicia Penal?

-No. Yo creo que el error fue no haber capacitado bien a los policías y sobre todo, honestamente. La vida va hacia adelante y las cosas deben ir evolucionando, y el derecho debe ir evolucionando… Hoy se habla de la Policía Científica, pero el policía tiene un problema grave: no verbaliza adecuadamente, porque no lo dejan hablar sus mandos y no redacta adecuadamente. Entonces, cualquier abogado que sí se está preparando, les da una revolcada y acaba el policía detenido y el delincuente, en la calle.

Es tiempo de cambios

Ante todo este panorama, Guillermo Hidalgo expone que es tiempo de cambios a nivel gubernamental, como los relevos en el gabinete municipal; pero también es momento de voltear a ver a la comunidad y que cada miembro asuma su responsabilidad, pues llegará el momento en que no haya a quien asaltar ni a quien agredir.

Refiere que hay mucha gente que desea vivir en paz y que anhela realizar sus actividades cada día sin temor.