Salud

Pérdida de peso: porqué decir sí al ejercicio

Para producir una reducción de peso corporal es necesario un “desequilibrio”, por decirlo así, entre la cantidad de energía (calorías) que se gasta y las que consume. La idea es que la cantidad de calorías gastadas sea superior a las que ingieren a través de la comida. Este equilibrio puede lograrse reduciendo los alimentos que consume a diario.

Basándonos en esta premisa calórica, que cuando hacemes mucho más fácil producir un déficit de energía cuando controlamos la ingesta de alimentos que cuando hacemos actividad física .Por ejemplo, dos rebanadas de queso amarillo (30gramos c/u) contienen alrededor de 230 calorías. Gastar esas calorías haciendo actividad física implicaría caminar a paso moderado durante 50 minutos (para una persona de 71 kilogramos de peso).Sin duda, es mucho más fácil evitar comer esas rebanadas para quitarse calorías de encima. Igualmente, cada kilogramo de tejido adiposo almacena alrededor de siete mil calorías y si logramos que esta persona camine cinco días a la semana (230 calorías cada día), gastarían mil 150 calorías cada semana, lo que produciría una pérdida de peso de tan solo un kilogramo de tejido adiposo en seis semanas. Sin duda una velocidad de reducción de peso nada alentadora.

Reducir el peso corporal sólo con actividad física es posible, pero es necesario realizar sesiones de entrenamiento prolongadas y de alta intensidad, que las personas con sobrepeso no están en capacidad de realizar. Además, podrían alejarse aún más de la actividad física.

¿Entonces para que el ejercicio?

Si bien la pérdida de peso se puede lograr más fácilmente reduciendo la ingesta de alimentos, el ejercicio ayuda a producir un balance calórico negativo, lo cual permite que las personas pierdan algo adicional de grasa corporal.

Pero quizás lo más importante es que las personas que realizan actividad física  tienen un mejor pronóstico para no volver a ganar kilos perdidos. Es decir, las personas activas mantienen el peso perdido durante más tiempo y esto sin duda es mucho más importante que reducir unos cuantos kilos y volverlos a recuperar rápidamente. El efecto rebote, pues.

Otro de los efectos benéficos de realizar actividad física es que permite mejorar la composición corporal. Me refiero a que cuando se realiza actividad física  se estimula a los músculos para que se mantengan en su lugar y no se pierdan con los kilos que se está quitando. El resultado es una mejor apariencia física -menos tejidos flácidos- y una tasa metabólica ligeramente superior ( ya que el músculo tiene un  metabolismo elevado en comparación con otros tejidos).

Inclusive las personas  que no pierden peso  pueden beneficiarse del ejercicio obtenido provechos adicionales para su salud que van más allá  del valor de la báscula, por ejemplo, mejor tolerancia a la glucosa, bajos niveles de lípidos sanguíneos, etc.

 

Gracias por su atención, cualquier comentario es bien recibido en el correo abhayatobon@gmail.com