De: Dudas
El descarrilamiento del Tren Interoceánico que dejó un saldo al momento de trece personas fallecidas, deja dudas sobre las causas del trágico percance, al tiempo que deja mal paradas a las autoridades.
En primer lugar, porque la denominada Línea Z entró en operación en 2023, para el transporte de carga y pasaje, y cubre la ruta de Salina Cruz a Coatzacoalcos.
Evidentemente, de inmediato, la 4T comenzó frenar el acceso a la información a partir de señalar la Fiscalía General de la República, inició la investigación del caso.
Lo cuestionable en el fondo es que se haya registrado un percance de ese tipo en una línea relativamente nueva.
Por otra parte, si bien se han informado los nombres de las 36 personas hospitalizadas, y rápidamente se ha dado cuenta de que algunas de ellas fueron dadas de alta, lo negativo es que no se haya informado los nombres de los 13 fallecidos.
De acuerdo a información oficial en el tren viajaban 250 personas incluidos los nueve integrantes de la tripulación, pero solo resultaron lesionadas 98, de ellas 36 fueron hospitalizadas y hay trece fallecidos.
La visita a los lesionados en hospitales por parte de autoridades como el ciudadano director del IMSS y las condolencias de la ciudadana presidenta, forman parte de la parafernalia oficial.
Este es un caso en el que, a diferencia del percance de la Línea Dorada del Metro, aparentemente no es posible culpar al pasado, por lo que habrá que esperar para ver la forma en la que se confirma que la 4T no se investiga a sí misma.
Lo elemental será que se busque encaminar el caso hacia una labor de sabotaje, para endosar culpas.
Lo inmediato, será constatar la forma en la que se cubren las indemnizaciones a que haya lugar y son obligados, a partir de que el tren como todo medio de transporte debe contar con seguros para hacer frente a ese tipo de percances.
En lo que hace a la indagatorias, independientemente de los peritajes, lo principal será revisar quienes fueron los encargados del tendido de vías, así como los proveedores de rieles y por supuesto de balastro, un elemento que fue acremente cuestionado en el pasado mediato.
De inmediato, el responsable moral está plenamente identificado. Es claro que quien es capaz de apreciar la más leve mácula en el ojo ajeno, es incapaz de percibir el daño que causa una viga en el propio.
Este es un caso en el que de nueva cuenta se aplicará la máxima juarista (a los amigos justicia y gracia, a los adversarios, ley) y se dará rápidamente vuelta a la página.
Y si no, al tiempo.
Terrorismo
La vinculación a proceso, en Veracruz, del ciudadano periodista Rafael León Segovia por terrorismo, entre otros eventuales delitos, de consolidarse dejara en claro la persecución contra informadores que se lleva a cabo en algunas entidades por la vía judicial.
Pero primordialmente, documentará el hecho de que en México de alguna u otra forma hay terrorismo.
Por: Alejandro Villegas
