Llega a 620 el número de templos afectados el 19S
El gobernador Antonio Gali informó más de 500 templos y capillas ya se encuentran en proceso de restauración.
Texto: Guillermo Castillo/Redacción
Foto: Cortesía
La cantidad de templos dañados por el sismo del 19 de septiembre de 2017 creció de 558 a 620, debido a una gran cantidad de capillas que han sido detectadas con afectaciones, especialmente, en la Mixteca de Puebla.
Así lo reveló el gobernador José Antonio Gali Fayad, quien aseguró que en más de 500 ya iniciaron los trabajos de reconstrucción, lo que –subrayó– implica que más de 50 por ciento estén en proceso de rehabilitación.
Durante una entrevista, explicó que los recursos de los seguros que tenían los templos, han comenzado a fluir y en el caso de los edificios más pequeños, el gobierno del estado ha aportado kits de materiales de construcción.
Expuso que mientras tanto, se espera la llegada de los recursos del FONDEN para continuar con los restantes en los meses que quedan de su gestión y aseguró que los inmuebles religiosos no se dejarán en el abandono.
Recorre Antonio Gali templos en Puebla
Esto, al supervisar los trabajos en iglesias y monumentos afectados en el centro histórico de la capital, como el Convento de San Francisco, donde se lleva a cabo la reconstrucción del cupulín así como el sostén de bóvedas y nervaduras, con cimbra de acero a 30 metros de altura, para recuperar la estabilidad del inmueble.
En tanto, en la Biblioteca Central Estatal Miguel de la Madrid, Antonio Gali constató el apuntalamiento estructural, la terminación de aplanados y pintura en las naves central y laterales.
Asimismo, en la Capilla de Dolores verificó la reparación de fracturas, en las que se utilizaron elementos de piedra y tabique; además, se recuperaron pinturas y se dio mantenimiento con hidrofugantes.
En el Templo de San Roque, al ser uno de los más dañados por el movimiento telúrico, se cambió el sistema de cubiertas y enladrillado con bases de acero; de igual forma, se tejieron en su forma original pilares, bóvedas, muros y decoraciones.
Finalmente, en la Iglesia de la Compañía, se reintegraron arcos, bóvedas y se reedificó la torre y los botareles con acero, para dar mayor resistencia.
